Cada día que pasa el gobierno aprista tiene que hacer frente a nuevos sectores oprimidos que se levantan a la lucha. A esta altura del proceso, no espera el desenlace frontal contra los sectores populares: los ataca desde un comienzo; pero no de una manera abierta, sino recurriendo a pervertir los sentimientos reivindicativos del pueblo, apareciendo como “preocupado” por éstos, pero, en realidad, tratando de enfrentar al pueblo contra el pueblo. Veamos algunos casos.
CONTRA LOS PROFESORES
De esta manera es como encaró la lucha del SUTEP:
- ¿Qué los maestros quieren aumento y muchas cosas más? Muy bien. Les daremos todo. Pero, previamente, pasen la evaluación que les imponemos, pues no queremos profesores mediocres ni comechados que vayan a calentar escritorios. ¿No es así pueblo peruano? ¿Queremos o no mejores profesores y una alta calidad educativa para nuestros hijos?
Y el resto del pueblo dice:
- Siiiii.
¿Y quien no quiere ello?
El gobierno pervierte el anhelo reivindicativo del pueblo. Para eso, se apoya en todos los medios de comunicación. Así, le quita respaldo social al SUTEP. Lo somete a sus exigencias y lo derrota en la práctica. Esto es lo que más quería el gobierno: derrumbar y desprestigiar políticamente al SUTEP; para que más tarde le sea muy difícil levantarse con respaldo social a la acción.
El gobierno sale socialmente prestigiado, políticamente victorioso y, en lo económico, se ahorra cumplir todo el pliego reivindicativo del SUTEP, pues lo pateó a un lado.
¿Tenemos mejores docentes? ¿Se ha elevado la calidad educativa? Esta es la tierra que el gobierno tira a los ojos del pueblo, para que no vea la problemática de fondo: profesores mal pagados que tienen que buscar otros lugares para enseñar, u otros trabajos, para incrementar sus magros ingresos. ¿Qué tiempo así les queda para su capacitación?... Y, sin embargo, por cuenta propia, con sus propias instituciones, los maestros se capacitan, pues, en este punto, el Estado es deficiente, y los tiene abandonados.
Sueldos míseros y nula infraestructura estatal de capacitación: este es el terreno general, y de fondo, sobre el que transcurre la carrera de los docentes.
Pero todo el afán del gobierno fue traer un aspecto tangencial (la evaluación), que nada tenía que ver con la atención del petitorio de los docentes, para derrotar política, sindical y socialmente a los maestros.
CONTRA EL SUR CHICO
La primera gran ola del movimiento popular tuvo como “dique” fortuito al terremoto del 15 de agosto, que afectó principalmente al sur chico del país (Ica y Huancavelica). Van a ser tres meses de esta catástrofe y ni siquiera se han terminado de levantar los escombros; mucho menos se ha iniciado el proceso de reconstrucción. Pero la inoperancia del Estado trató de ser ocultada por el gobierno.
Alan García se afanó en ir a la misma Plaza principal de Pisco. Atendió micrófonos y pidió cámaras. Se paseó sobre los cadáveres y caminó entre los escombros. Con rostro compungido, trató de aparecer como el más preocupado en la atención del siniestro.
- ¿Qué hay saqueos por el hambre y la falta de ayuda? ¡Eso es falso! Los desmanes sociales que muestran las televisoras no son reales. No hay mujeres, viejos ni niños clamando al borde de las carreteras, por pan y ayuda. No hay saqueos de mercados, comercios ni viviendas; ¡pues nadie ha ido a la Comisaría a denunciar esos hechos!... ¿Qué los primeros en robar son los propios órganos del gobierno, Defensa Civil y el Sistema Integral de Salud? ¡Pero esto no debe empañar el hecho que la figura principal del gobierno estuvo presente en el mismo terreno sobre el que, enseguida, vendrán los robos más inimaginables!
En efecto; eso es lo que vendrá con FORSUR…
Miles de toneladas en ayuda material, provenientes del país y del extranjero, no han llegado nunca a su destino. Ocasionalmente, se van descubriendo depósitos en donde están escondidas esas donaciones. Seguramente mañana veremos negociando las 10,000 frazadas térmicas que mandó El Salvador, las tiendas de campaña que envió Francia, los víveres que trajeron nuestros hermanos bolivianos, etc., etc. Todo esto lo sufrirá el mismo pueblo. Mientras que el gobierno se contentará con su pírrica victoria mediática.
- ¿Qué los voluntarios extranjeros se han asustado por escuchar balazos al caminar entre los escombros? ¡¡¡Pues, el que tenga miedo que se regrese a su tierra!!! –vocifera Alan García.
¡Ups! Se fue de boca. El no quiere ser así. Seguramente diría:
- A ver, que vengan los millones de dólares de las donaciones extranjeras para robar (¡ups; nos fuimos de mano!; disculpen), digo, para canalizarlos (hacia nuestros bolsillos: piensa íntimamente) creando FORSUR.
Y, pisoteando todo el ordenamiento institucional existente crea este nuevo organismo, al mando de su amigote Julio Favre (otrora izquierdoso; hoy ultra reaccionario) para ganar nuevamente tribuna; pero, en realidad, y más que nada, para agarrarse, con sus compinches, algunos milloncitos de las donaciones; pues así roban estos “grandes”... ¡Qué se van a dedicar a carpitas y a medicinitas!
Favre declara que FORSUR tiene 170 millones de soles y 100 millones de dólares “en donaciones prometidas, aún no efectivas”.
Revisamos rápidamente en los periódicos y encontramos algunas de las donaciones que se anunciaron en los momentos inmediatos al sismo:
De Canadá: 2 millones de dólares.
De la Unión Europea: 1 millón de euros.
De España: 7’150,000 euros (no de toda España: 6 millones de Andalucía, 250 mil de Madrid, 600 mil de Navarra y 300 mil de Cataluña).
De Francia: 300 mil euros.
De Italia: 200 mil euros.
El gobierno de los Estados Unidos (la principal superpotencia que tiene sojuzgada a nuestra nación): 150 mil dólares… miserablemente.
La pequeña Taiwán (tantas veces remecida por sismos): 100 mil dólares.
Sumemos: 13’740,000 dólares; aproximadamente. Cerca de 14 millones de dólares.
¿Es que eso fue tan sólo prometido y nada ha llegado al Perú? Estamos hablando de las primeras donaciones de 5 países, 4 localidades y la Unión Europea, entre las recolecciones y donaciones que en muchos países más, a nivel mundial, se hicieron.
Hablamos de instituciones de gobierno; pero hubo mucho más. En casi todos los bancos europeos se abrieron cuentas para que sus usuarios alcancen donaciones en efectivo destinados al Perú. Lo mismo hicieron los principales bancos en América (aparte de las cuentas que se abrieron en los bancos del Perú). ¿Todos esos depósitos fueron “sólo prometidos” y, hasta ahora, “no efectivos”? ¡Dios mío; que santísimo misterio es éste!... ¿O es que los banqueros de Inglaterra, Japón, México, Argentina, etc., etc., se han quedado con todo el dinero recolectado? ¡Atención camaradas extranjeros!
Veamos los soles. No contemos los recortes que se hicieron a los sueldos de los trabajadores, y que luego los empresarios presentaron como donaciones suyas; contemos, tan sólo, el hecho que un cantautor, Gianmarco, recolectó en una sola función artística casi 2 millones de soles… ¡Y, sumando los dineros provenientes de todos los lugares, de todas las personas e instituciones, el inefable Favre viene aquí y nos dice, orondo, que tiene 170 millones de soles y 100 millones de dólares prometidos pero no habidos! ¡Esto es increíble! ¿Cuántos milloncitos se han enbolsillado ya?
Muchos gobiernos del extranjero conocen la catadura delincuencial, lumpenesca y ratera, del APRA; es por ello que no remiten finalmente el efectivo. Pero que hay dinero destinado para el Sur; lo hay. García y Favre los tratan de convencer, para que “suelten” ese dinero, mostrándoles cómo serían las casas de la reconstrucción. Pero la duda los mata.
FORSUR es la tierra que se echa a los ojos del pueblo para tapar el robo millonario que Alan García, Julio Favre y sus secuaces vienen cometiendo. Y por eso es que no quieren que participen en la recepción, control y destino de los fondos ninguna organización de carácter popular. ¡Que la plebe siga muriéndose de hambre y frío en el sur chico; el gobierno aprista engorda cada día más!
Las organizaciones populares deben enfrentar todo esto. Deben realizar nuevas jornadas de lucha; y uno de sus objetivos debe ser ganar la participación en la dirección del proceso de reconstrucción del sur chico; para lo cual deben nombrar representantes removibles (contra el peligro de la corrupción).
CONTRA LOS MEDICOS, ENFERMERAS, ETC.
Los médicos, enfermeras, obstetrices, tecnólogos médicos y otros trabajadores de la salud anuncian el reinicio de sus paralizaciones, exigiendo mejores remuneraciones y mejores condiciones de trabajo. Ante esto, el gobierno saca a la luz el problema de la negligencia médica:
- Compatriotas –dice Alan García-, el gobierno quiere que las limitaciones o muertes que causen las negligencias médicas sean atendidas por un seguro especial, ya que esos casos no son atendidos por nadie. ¿Están de acuerdo?
Claro que todo el mundo estará de acuerdo con que una negligencia médica sea debidamente reparada; pero se da el caso que, para ello, no es necesario contar con ningún seguro especial: vasta que el propio Seguro Social del Perú asuma plenamente su responsabilidad y se haga cargo de todos esos casos.
Pero Alan García nuevamente tira tierra a los ojos del pueblo, para no atender el estado calamitoso de la estructura (material, técnica, económica) del sistema de salud peruano, y para malquistar al conjunto del pueblo contra la lucha de los trabajadores del área de salud.
Pero hay un detalle más. Alan García y sus secuaces no dan puntada sin hilo: las comisiones que cobrarían (y que ya esperan, frotándose ávidamente las manos) de las compañías privadas de seguro, que entrarían en este negociado.
- No importa –dice Alan- que los médicos no quieran pagar ese seguro. El Estado lo asumirá.
Pero lo que nunca dirá es cuánto se enbolsillarán él, sus consortes y los futuros gobernantes, que lleguen a coger ese anunciado botín. Esta es la cuestión de fondo: no la vida, no la salud ni la integridad de los obreros, campesinos, empleados, etc.; sino una nueva arca, que le rinda por millones a quien detente el gobierno del Estado.
CONTRA LOS DOCENTES UNIVERSITARIOS
Por Ley, los sueldos de los docentes universitarios deben estar en correspondencia con los sueldos de los magistrados judiciales. Esta disposición data de 1983; es decir, más de 24 años y hasta ahora no se cumple con esta homologación.
El gobierno de Toledo tuvo que afrontar las luchas de los docentes universitarios por este punto, y, mediante Decreto, aceptó un calendario de nivelación, en armadas, por el cual ésta se terminaría de cumplir en el 2008. Pero había un contrabando de fondo: se trataban de incrementos no considerados como remuneración. Ahora, el gobierno aprista sigue en la misma línea, precisando que otorgará una “asignación especial” que “no tiene carácter ni naturaleza remunerativa ni pensionable así como tampoco está afecta a cargas sociales”, asimismo “no constituye base de cálculo para cualquier tipo de bonificación, asignaciones o entregas”. Esto es: legalmente no será una homologación de las remuneraciones. Esto es: no se cumple la Ley. Se la burla. Se la pisotea. Se desconocen por completo todos los acuerdos anteriores. Se hace escarnio de la inteligencia, de la necesidad y del derecho de los catedráticos peruanos.
Por su puesto, esto no lo dice Alan García al pueblo. En todos los medios de comunicación vocifera:
- Daremos la asignación especial pero previamente los profesores deben ser evaluados; y sólo los que pasen esa evaluación tendrán derecho a cobrarla. ¿De acuerdo pobladores del Perú?
- ¡De acuerdo!
- ¡¡¡Pero los profesores no quieren ser evaluados!!!
Así trafican los apristas y pervierten la mente y los sentimientos populares.
La Ley de la homologación no establece ningún “pero” previo. Reconoce un derecho pleno. Además, los docentes tienen evaluaciones periódicas en sus universidades (cada 3, 5 o 7 años, según su categoría). Entonces, la “evaluación” aprista está fuera de lugar y persigue otros objetivos: ganar respaldo social, quitarle base a la lucha docente y derrotarla políticamente, pues se trata de un sector muy activo en las filas del movimiento popular. Por eso, dicen los apristas, ¡palo con ellos! Y, así, le rompieron la cabeza al dirigente máximo de la FENDUP.
LA JORNADA DE LUCHA DEL 8 DE NOVIEMBRE
En su reconocida cantaleta, Alan García ha levantado el fantasma del comunismo, del senderismo, del chavismo, del nacionalismo de Ollanta y de todos los que perdieron las elecciones, para despotricar contra la jornada de lucha del 8 de noviembre.
Jorge del Castillo, en cambio, tiene su estilo propio: haciéndose el imbécil proclama alegremente que “el Paro Nacional del 8 de noviembre se ha desinflado”, y así quiere hacer pasar por tonto a todo el pueblo peruano; cuando, en realidad, no se ha llamado a ningún Paro nacional para esa fecha, sino a una JORNADA NACIONAL DE LUCHA.
Mauricio Mulder, más supremo, ningunea a la jornada de protesta, nos llama “tontos útiles”, y convoca a gritos a “todas” las fuerzas democráticas a movilizarse contra dicha jornada. Es decir, procura enfrentar al pueblo contra otros sectores del pueblo, que siguen al APRA o que pueden ser movilizados por ellos, valiéndose de la estructura que el Estado les permite.
En el campo popular todavía hay debilidades. Deben coordinarse las paralizaciones parciales de algunos sectores para que se inicien con la fecha señalada para la protesta. Las fuerzas del pueblo no deben desperdigarse, sino concentrarse monolíticamente, para que así las huelgas indefinidas de trabajadores se vean igualmente reforzadas.
La táctica del gobierno apunta a dividirnos y a enfrentarnos entre nosotros. Denunciemos esa treta. Recojamos nuestras fuerzas y, unidos, avancemos por el camino de la lucha decidida contra el Estado reaccionario y el capital. Forjemos otra jornada de lucha victoriosa en nuestra historia.
Lima, 07 de noviembre de 2007.
Arturo Chávez Panta.
CONTRA LOS PROFESORES
De esta manera es como encaró la lucha del SUTEP:
- ¿Qué los maestros quieren aumento y muchas cosas más? Muy bien. Les daremos todo. Pero, previamente, pasen la evaluación que les imponemos, pues no queremos profesores mediocres ni comechados que vayan a calentar escritorios. ¿No es así pueblo peruano? ¿Queremos o no mejores profesores y una alta calidad educativa para nuestros hijos?
Y el resto del pueblo dice:
- Siiiii.
¿Y quien no quiere ello?
El gobierno pervierte el anhelo reivindicativo del pueblo. Para eso, se apoya en todos los medios de comunicación. Así, le quita respaldo social al SUTEP. Lo somete a sus exigencias y lo derrota en la práctica. Esto es lo que más quería el gobierno: derrumbar y desprestigiar políticamente al SUTEP; para que más tarde le sea muy difícil levantarse con respaldo social a la acción.
El gobierno sale socialmente prestigiado, políticamente victorioso y, en lo económico, se ahorra cumplir todo el pliego reivindicativo del SUTEP, pues lo pateó a un lado.
¿Tenemos mejores docentes? ¿Se ha elevado la calidad educativa? Esta es la tierra que el gobierno tira a los ojos del pueblo, para que no vea la problemática de fondo: profesores mal pagados que tienen que buscar otros lugares para enseñar, u otros trabajos, para incrementar sus magros ingresos. ¿Qué tiempo así les queda para su capacitación?... Y, sin embargo, por cuenta propia, con sus propias instituciones, los maestros se capacitan, pues, en este punto, el Estado es deficiente, y los tiene abandonados.
Sueldos míseros y nula infraestructura estatal de capacitación: este es el terreno general, y de fondo, sobre el que transcurre la carrera de los docentes.
Pero todo el afán del gobierno fue traer un aspecto tangencial (la evaluación), que nada tenía que ver con la atención del petitorio de los docentes, para derrotar política, sindical y socialmente a los maestros.
CONTRA EL SUR CHICO
La primera gran ola del movimiento popular tuvo como “dique” fortuito al terremoto del 15 de agosto, que afectó principalmente al sur chico del país (Ica y Huancavelica). Van a ser tres meses de esta catástrofe y ni siquiera se han terminado de levantar los escombros; mucho menos se ha iniciado el proceso de reconstrucción. Pero la inoperancia del Estado trató de ser ocultada por el gobierno.
Alan García se afanó en ir a la misma Plaza principal de Pisco. Atendió micrófonos y pidió cámaras. Se paseó sobre los cadáveres y caminó entre los escombros. Con rostro compungido, trató de aparecer como el más preocupado en la atención del siniestro.
- ¿Qué hay saqueos por el hambre y la falta de ayuda? ¡Eso es falso! Los desmanes sociales que muestran las televisoras no son reales. No hay mujeres, viejos ni niños clamando al borde de las carreteras, por pan y ayuda. No hay saqueos de mercados, comercios ni viviendas; ¡pues nadie ha ido a la Comisaría a denunciar esos hechos!... ¿Qué los primeros en robar son los propios órganos del gobierno, Defensa Civil y el Sistema Integral de Salud? ¡Pero esto no debe empañar el hecho que la figura principal del gobierno estuvo presente en el mismo terreno sobre el que, enseguida, vendrán los robos más inimaginables!
En efecto; eso es lo que vendrá con FORSUR…
Miles de toneladas en ayuda material, provenientes del país y del extranjero, no han llegado nunca a su destino. Ocasionalmente, se van descubriendo depósitos en donde están escondidas esas donaciones. Seguramente mañana veremos negociando las 10,000 frazadas térmicas que mandó El Salvador, las tiendas de campaña que envió Francia, los víveres que trajeron nuestros hermanos bolivianos, etc., etc. Todo esto lo sufrirá el mismo pueblo. Mientras que el gobierno se contentará con su pírrica victoria mediática.
- ¿Qué los voluntarios extranjeros se han asustado por escuchar balazos al caminar entre los escombros? ¡¡¡Pues, el que tenga miedo que se regrese a su tierra!!! –vocifera Alan García.
¡Ups! Se fue de boca. El no quiere ser así. Seguramente diría:
- A ver, que vengan los millones de dólares de las donaciones extranjeras para robar (¡ups; nos fuimos de mano!; disculpen), digo, para canalizarlos (hacia nuestros bolsillos: piensa íntimamente) creando FORSUR.
Y, pisoteando todo el ordenamiento institucional existente crea este nuevo organismo, al mando de su amigote Julio Favre (otrora izquierdoso; hoy ultra reaccionario) para ganar nuevamente tribuna; pero, en realidad, y más que nada, para agarrarse, con sus compinches, algunos milloncitos de las donaciones; pues así roban estos “grandes”... ¡Qué se van a dedicar a carpitas y a medicinitas!
Favre declara que FORSUR tiene 170 millones de soles y 100 millones de dólares “en donaciones prometidas, aún no efectivas”.
Revisamos rápidamente en los periódicos y encontramos algunas de las donaciones que se anunciaron en los momentos inmediatos al sismo:
De Canadá: 2 millones de dólares.
De la Unión Europea: 1 millón de euros.
De España: 7’150,000 euros (no de toda España: 6 millones de Andalucía, 250 mil de Madrid, 600 mil de Navarra y 300 mil de Cataluña).
De Francia: 300 mil euros.
De Italia: 200 mil euros.
El gobierno de los Estados Unidos (la principal superpotencia que tiene sojuzgada a nuestra nación): 150 mil dólares… miserablemente.
La pequeña Taiwán (tantas veces remecida por sismos): 100 mil dólares.
Sumemos: 13’740,000 dólares; aproximadamente. Cerca de 14 millones de dólares.
¿Es que eso fue tan sólo prometido y nada ha llegado al Perú? Estamos hablando de las primeras donaciones de 5 países, 4 localidades y la Unión Europea, entre las recolecciones y donaciones que en muchos países más, a nivel mundial, se hicieron.
Hablamos de instituciones de gobierno; pero hubo mucho más. En casi todos los bancos europeos se abrieron cuentas para que sus usuarios alcancen donaciones en efectivo destinados al Perú. Lo mismo hicieron los principales bancos en América (aparte de las cuentas que se abrieron en los bancos del Perú). ¿Todos esos depósitos fueron “sólo prometidos” y, hasta ahora, “no efectivos”? ¡Dios mío; que santísimo misterio es éste!... ¿O es que los banqueros de Inglaterra, Japón, México, Argentina, etc., etc., se han quedado con todo el dinero recolectado? ¡Atención camaradas extranjeros!
Veamos los soles. No contemos los recortes que se hicieron a los sueldos de los trabajadores, y que luego los empresarios presentaron como donaciones suyas; contemos, tan sólo, el hecho que un cantautor, Gianmarco, recolectó en una sola función artística casi 2 millones de soles… ¡Y, sumando los dineros provenientes de todos los lugares, de todas las personas e instituciones, el inefable Favre viene aquí y nos dice, orondo, que tiene 170 millones de soles y 100 millones de dólares prometidos pero no habidos! ¡Esto es increíble! ¿Cuántos milloncitos se han enbolsillado ya?
Muchos gobiernos del extranjero conocen la catadura delincuencial, lumpenesca y ratera, del APRA; es por ello que no remiten finalmente el efectivo. Pero que hay dinero destinado para el Sur; lo hay. García y Favre los tratan de convencer, para que “suelten” ese dinero, mostrándoles cómo serían las casas de la reconstrucción. Pero la duda los mata.
FORSUR es la tierra que se echa a los ojos del pueblo para tapar el robo millonario que Alan García, Julio Favre y sus secuaces vienen cometiendo. Y por eso es que no quieren que participen en la recepción, control y destino de los fondos ninguna organización de carácter popular. ¡Que la plebe siga muriéndose de hambre y frío en el sur chico; el gobierno aprista engorda cada día más!
Las organizaciones populares deben enfrentar todo esto. Deben realizar nuevas jornadas de lucha; y uno de sus objetivos debe ser ganar la participación en la dirección del proceso de reconstrucción del sur chico; para lo cual deben nombrar representantes removibles (contra el peligro de la corrupción).
CONTRA LOS MEDICOS, ENFERMERAS, ETC.
Los médicos, enfermeras, obstetrices, tecnólogos médicos y otros trabajadores de la salud anuncian el reinicio de sus paralizaciones, exigiendo mejores remuneraciones y mejores condiciones de trabajo. Ante esto, el gobierno saca a la luz el problema de la negligencia médica:
- Compatriotas –dice Alan García-, el gobierno quiere que las limitaciones o muertes que causen las negligencias médicas sean atendidas por un seguro especial, ya que esos casos no son atendidos por nadie. ¿Están de acuerdo?
Claro que todo el mundo estará de acuerdo con que una negligencia médica sea debidamente reparada; pero se da el caso que, para ello, no es necesario contar con ningún seguro especial: vasta que el propio Seguro Social del Perú asuma plenamente su responsabilidad y se haga cargo de todos esos casos.
Pero Alan García nuevamente tira tierra a los ojos del pueblo, para no atender el estado calamitoso de la estructura (material, técnica, económica) del sistema de salud peruano, y para malquistar al conjunto del pueblo contra la lucha de los trabajadores del área de salud.
Pero hay un detalle más. Alan García y sus secuaces no dan puntada sin hilo: las comisiones que cobrarían (y que ya esperan, frotándose ávidamente las manos) de las compañías privadas de seguro, que entrarían en este negociado.
- No importa –dice Alan- que los médicos no quieran pagar ese seguro. El Estado lo asumirá.
Pero lo que nunca dirá es cuánto se enbolsillarán él, sus consortes y los futuros gobernantes, que lleguen a coger ese anunciado botín. Esta es la cuestión de fondo: no la vida, no la salud ni la integridad de los obreros, campesinos, empleados, etc.; sino una nueva arca, que le rinda por millones a quien detente el gobierno del Estado.
CONTRA LOS DOCENTES UNIVERSITARIOS
Por Ley, los sueldos de los docentes universitarios deben estar en correspondencia con los sueldos de los magistrados judiciales. Esta disposición data de 1983; es decir, más de 24 años y hasta ahora no se cumple con esta homologación.
El gobierno de Toledo tuvo que afrontar las luchas de los docentes universitarios por este punto, y, mediante Decreto, aceptó un calendario de nivelación, en armadas, por el cual ésta se terminaría de cumplir en el 2008. Pero había un contrabando de fondo: se trataban de incrementos no considerados como remuneración. Ahora, el gobierno aprista sigue en la misma línea, precisando que otorgará una “asignación especial” que “no tiene carácter ni naturaleza remunerativa ni pensionable así como tampoco está afecta a cargas sociales”, asimismo “no constituye base de cálculo para cualquier tipo de bonificación, asignaciones o entregas”. Esto es: legalmente no será una homologación de las remuneraciones. Esto es: no se cumple la Ley. Se la burla. Se la pisotea. Se desconocen por completo todos los acuerdos anteriores. Se hace escarnio de la inteligencia, de la necesidad y del derecho de los catedráticos peruanos.
Por su puesto, esto no lo dice Alan García al pueblo. En todos los medios de comunicación vocifera:
- Daremos la asignación especial pero previamente los profesores deben ser evaluados; y sólo los que pasen esa evaluación tendrán derecho a cobrarla. ¿De acuerdo pobladores del Perú?
- ¡De acuerdo!
- ¡¡¡Pero los profesores no quieren ser evaluados!!!
Así trafican los apristas y pervierten la mente y los sentimientos populares.
La Ley de la homologación no establece ningún “pero” previo. Reconoce un derecho pleno. Además, los docentes tienen evaluaciones periódicas en sus universidades (cada 3, 5 o 7 años, según su categoría). Entonces, la “evaluación” aprista está fuera de lugar y persigue otros objetivos: ganar respaldo social, quitarle base a la lucha docente y derrotarla políticamente, pues se trata de un sector muy activo en las filas del movimiento popular. Por eso, dicen los apristas, ¡palo con ellos! Y, así, le rompieron la cabeza al dirigente máximo de la FENDUP.
LA JORNADA DE LUCHA DEL 8 DE NOVIEMBRE
En su reconocida cantaleta, Alan García ha levantado el fantasma del comunismo, del senderismo, del chavismo, del nacionalismo de Ollanta y de todos los que perdieron las elecciones, para despotricar contra la jornada de lucha del 8 de noviembre.
Jorge del Castillo, en cambio, tiene su estilo propio: haciéndose el imbécil proclama alegremente que “el Paro Nacional del 8 de noviembre se ha desinflado”, y así quiere hacer pasar por tonto a todo el pueblo peruano; cuando, en realidad, no se ha llamado a ningún Paro nacional para esa fecha, sino a una JORNADA NACIONAL DE LUCHA.
Mauricio Mulder, más supremo, ningunea a la jornada de protesta, nos llama “tontos útiles”, y convoca a gritos a “todas” las fuerzas democráticas a movilizarse contra dicha jornada. Es decir, procura enfrentar al pueblo contra otros sectores del pueblo, que siguen al APRA o que pueden ser movilizados por ellos, valiéndose de la estructura que el Estado les permite.
En el campo popular todavía hay debilidades. Deben coordinarse las paralizaciones parciales de algunos sectores para que se inicien con la fecha señalada para la protesta. Las fuerzas del pueblo no deben desperdigarse, sino concentrarse monolíticamente, para que así las huelgas indefinidas de trabajadores se vean igualmente reforzadas.
La táctica del gobierno apunta a dividirnos y a enfrentarnos entre nosotros. Denunciemos esa treta. Recojamos nuestras fuerzas y, unidos, avancemos por el camino de la lucha decidida contra el Estado reaccionario y el capital. Forjemos otra jornada de lucha victoriosa en nuestra historia.
Lima, 07 de noviembre de 2007.
Arturo Chávez Panta.
